Ante “el fracaso total”, el reto es devolver la seguridad: exombudsman
Pablo Enrique Vargas se pronuncó en contra de la utilización de militares en tareas de seguridad pública, pero reconoció que por las circunstancias actuales, “no hay otro remedio”, hasta que las policías tengan un alto grado de calificación y de profesionalismo
Si bien los grandes problemas que aquejan a la nación mexicana tienen una larga trayectoria histórica, el regreso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) prometía un cambio a la espiral de violencia y descomposición acentuada en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012); sin embargo, para Pablo Enrique Vargas Gómez, expresidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), el sexenio que terminó fue “un total fracaso”.
“Cuando un Estado no cumple con una obligación primordial como la seguridad, lo demás no puede funcionar”, sostuvo el académico de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ). Asimismo, Vargas consideró que estamos viviendo “un Estado fallido” que no puede cumplir con “una obligación primordial como la seguridad”.
Aunque Pablo Enrique Vargas se pronunció en contra de la utilización de militares en tareas de seguridad pública, también reconoce que por las circunstancias por las cuales atraviesa el país, “no hay otro remedio”. Lo anterior hasta que las policías estatales y municipales “tengan un alto grado de calificación y de profesionalismo para cumplir labores de seguridad y que paulatinamente los militares vayan regresando a los cuarteles”.
En ese marco, para Vargas Gómez, la Guardia Nacional propuesta por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, podrá ser una solución en lo inmediato, pero no a largo plazo. Por ello, destacó la necesidad de subsanar las necesidades básicas de las policías estatales y municipales, entre las que resaltó los bajos salarios de los elementos, así como la falta de prestaciones, “armamento caduco” y falta de capacitación.
Cabe recordar que según la Primera Encuesta Nacional de Estándares de Capacitación Policial, apenas el 1 por ciento de los elementos declararon ser policías por vocación, pero el 40 por ciento reconoció que se convirtieron en policías por no tener otra opción. Además, casi el 80 por ciento tienen problemas de sobrepeso u obesidad. La mitad de los casi 400 mil elementos tienen la preparatoria terminada.
Tras 12 años de la denominada “guerra contra el narcotráfico”, el saldo se registra en más de 250 mil muertes, según cifras oficiales. Además, el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED) estima casi 35 mil ciudadanos sin localizar. Así, la falta de garantías para el bienestar obligó a miles de personas a desplazarse de sus hogares.
Visión de Estado necesaria para el bienestar
Para quien fuera el tercer ombudsman del estado de Querétaro, el reto de López Obrador es evitar caer en los errores de sus antecesores. “Cada administración que llega al poder siempre quiere innovar, modificar e implementar políticas diferentes para supuestamente fortalecer la seguridad; cuando lo correcto es tener una visión de Estado”, sostuvo. Ello implica “un gran acuerdo nacional” que involucre a la sociedad civil y los partidos políticos.
En ese sentido, para Vargas Gómez el fracaso de las estrategias de Calderón y Peña Nieto se debió a que muchos cuerpos de seguridad son captados por el crimen organizado. Al respecto, una de las promeas de campaña del actual presidente es la creación de la Guardia Nacional conformada por policías y militares; como ya sucedió con la Agencia Federal de Investigación (AFI) creda por Vicente Fox, la actual Policía Federal creada por Calderón y la Gendarmería de Peña Nieto.
Para evitar lo anterior, sostuvo Vargas, además del “acuerdo nacional”, son necesarios “un persupuesto fijo sin modificación; policías calificados y profesionales; una observancia y respeto a los derechos humanos y una seguridad que no cambie según los colores del partido político que está en el poder”.
Además, destacó el papel de los observadores y gestores en materia de derechos humanos como fundamental, en un país donde han asesinado 161 activistas y 40 periodistas durante este sexenio, según la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos (Red TDT).
Para Vargas, la situación de inseguridad que vive México no se resolverá este sexenio. Asimismo, hizo un llamado a las fuerzas políticas para que “realmente se tenga una visión de Estado [a largo plazo]. De otra forma no vamos a avanzar. Si el Estado no puede garantizar la vida, la integridad, la dignidad de los ciudadanos, no hay paz social, no hay cohesión social y hay una degradación del tejido social”, finalizó.