Avanzan investigaciones para injertos de huesos
El objetivo principal es emparejar el tejido óseo mediante la aplicación de propiedades eléctricas y mecánicas, con lo cual se busca establecer semejanzas con la composición del hueso humano y de esta manera igualar la estructura y movimiento del injerto
En el ámbito de la ingeniería de tejidos óseos, actualmente se desarrolla un proyecto de investigación enfocado a la atención de fracturas e injertos o recubrimiento de huesos en el ser humano por parte del laboratorio de propiedades eléctricas del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), titulado “Síntesis e investigación de la estructura de propiedades del ‘Nanocompuesto quitosano hidroxiapatita óxido de grafeno’”.
El objetivo principal del proyecto es emparejar tejido óseo mediante la aplicación de propiedades eléctricas y mecánicas, con lo cual se busca establecer semejanzas con la composición del hueso humano para igualar la estructura y movimiento del injerto óseo.
Un dato importante es la aplicación del materiales como el quitosano y el óxido grafeno; el primero combate virus y bacterias; el segundo estimula las propiedades mecánicas y evita la fricción de la estructura ósea tratada. Además la hidroxiapatita permite que el crecimiento celular del tejido óseo se realice en corto tiempo al acelerar su desarrollo.
Esta investigación, de alto impacto para el sistema de salud, abona en el conocimiento profundo de la ingeniería de tejidos óseos. En él, participan los doctores Eugenio Prócoro, Gabriel Luna Bárcenas y el alumno de maestría Javier Villareal Castellón.
Aplicación humana: siguiente paso
El analista Villareal Castellón explicó que el proyecto puede ser aplicado tanto como injerto o recubrimiento, lo cual permite acelerar el crecimiento celular del tejido óseo en el ser humano. Para tal efecto y comprobación se han realizado pruebas en animales y los resultados son muy alentadores; no obstante, Villareal aclaró que no son concluyentes, pues aunque los objetivos son específicos, aún no se aplica al tejido de seres humanos.
La hidroxiapatita cálcica —de fórmula Ca10 (PO4)6 (OH)2)— es un constituyente inorgánico de los huesos y dientes. Puede ser sintético y se emplea como material de recubrimiento de las prótesis o implantes, como sustancia de relleno o para formar prótesis o implantes. El quitosano, también llamado chitosán, es un polisacárido lineal compuesto de cadenas distribuidas aleatoriamente. Esta sustancia se descubrió en 1859.
En la práctica ya existen prótesis recubiertas con hidroxiapatita pura y se ha observado un gran avance en la regeneración de tejidos óseos, también se han realizados diversos estudios con dos componentes como quitosano e hidroxapeno, tras lo cual hubo resultados importantes en fase experimental. No obstante, se requieren más estudios para observar los efectos en el fluido biológico y corporal, para así realizar injertos y observar su evolución en animales como el conejo o caballo.
Esta labor de investigación relacionada con la ingeniería de tejidos óseos aún se encuentra en proceso de desarrollo científico, no obstante está considerada como una exploración o investigación de frontera, para ello este laboratorio del Cinvestav es único en uso de fluidos procesados y la aplicación de propiedades eléctricas para la restauración e injertos de estructuras óseas, lo cual significa una posición de avanzada.
Es de destacar que tras los resultados y alcances de este proyecto hay una relación de intercambio informativo de los investigadores —dirigidos por el doctor Eugenio Prócoro— con científicos de una universidad italiana. Con dicha institución se realizan intercambios de resultados y avances sustantivos en la materia, además de avanzar en forma más eficiente y obtener resultados positivos en un futuro inmediato.