Diarrea, picaduras y “golpes”: los efectos del calor
Por: David A. Jiménez
PARA DESTACAR: Enfermedades gastroentéricas abundan en la temporada de calor; tres adultos mayores han fallecido en lo que va de 2016 debido a diarrea.
Ante las altas temperaturas de la primavera y el verano, las enfermedades gastroentéricas tales como la diarrea y el cólera son las que más abundan en la entidad queretana. Sin embargo, a decir de especialistas en salud, no se deben descartar problemas derivados del calor como dengue y cáncer de piel.
De acuerdo al corte del 30 de abril de la Secretaría de Salud de Querétaro (Seseq), se han registrado 21 mil 63 casos de diarrea en el estado, mismos que cobraron la vida de dos adultos mayores en Pedro Escobedo y otro más en el municipio de Querétaro. Menores de cinco años y mayores de 60 son los más vulnerables en este rubro. Los más de 21 mil casos representan un 18 por ciento menos en el mismo lapso respecto a 2015.
Guillermo Enrique Leo Amador, médico e infectólogo, declaró que “toda enfermedad infecciosa tiene una tasa de mortalidad” por lo que es necesario atenderse en estos casos por un especialista y evitar la automedicación. Añadió que las altas temperaturas aumentan las posibilidades de contaminación de alimentos, sobre todo aquellos procesados en la calles.
Leo Amador destacó tres tipos de diarrea: tipo 1 que no tiene proceso inflamatorio importante, puede resolverse con rehidratación; en la tipo 2 donde “hay presencia disentérica” o de sangre. Finalmente la tipo 3, además de ser muy rara, ya involucra enfermedades bacterianas graves, vinculadas a la salmonella.
Rosalba Romero Silis, subdirectora de epidemiología de la Seseq, explica que proliferan las enfermedades diarreicas “porque los alimentos se descomponen fácilmente por las altas temperaturas y hay proliferación de gérmenes”. Exhorta a la población a estar atentos ante el cólera que llega a producir cuadros graves de diarrea: “es sospechoso de cólera cuando son cinco evacuaciones líquidas en menos de 24 horas. Lo primero es hidratar”.
Para el control de las enfermedades entéricas, se realizan monitoreos constantes a puestos de comida, promoción en salud y se mantiene vigilancia epidemiológica permanente de enfermedades como cólera, diarrea e inclusive la influenza AH1N1 aunque su temporada de aparición haya pasado.
Picaduras de riesgo
El tiempo de calor, que abarca de abril a septiembre según la Seseq, también enciende los focos en cuanto a las picaduras de mosquitos que puedan transmitir el dengue, zika o chinkunguya: “los mosquitos son el vector de transmisión de estas enfermedades; ellos se reproducen en agua limpia, no sucia. Se recomienda tener limpio todo y sin cacharros”. La recomendación de escombrar se mantiene para las picaduras de alacrán.
Enrique Leo aclara que el llamado golpe de calor “es un estado febril secundario a una exposición a las altas temperaturas” y no corresponde a un agente patógeno, sin embargo hay posibilidad siempre de afectarse por este mal.
Finalmente, se recomienda usar protector solar mayor a 30 en su Factor de Protección Solar (FPS), no exponerse bajo el sol entre 10 y 4 de la tarde, ropa que cubra o gorras, al igual que estar bien hidratados con el fin de evitar golpes de calor y el propio cáncer de piel.