En Operativo Interinstitucional atentan contra Derechos Humanos

Tras encontrar un cuchillo de campismo en la camioneta del ciudadano, policías lo escoltaron hacia el MP para procesarlo

Por: Estefanía Elizondo / Carlo Aguilar

Por el ‘delito’ de traer en su cajuela un cuchillo que utiliza para practicar campismo, José Salvador Silva Reséndiz fue ‘víctima’ del Operativo Interinstitucional la tarde del martes 23 de julio: agentes de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) lo llevaron a dos agencias del Ministerio Público y fue liberado hasta que su esposa pagó una “fianza administrativa” de 3 mil pesos en la madrugada del miércoles 24, ocho horas después de su detención.

Todo comenzó cuando se dirigía a su domicilio en el fraccionamiento Viñedos después de salir del trabajo –su oficina está en la colonia Calesa, oriente de la ciudad en las inmediaciones de Hércules–.

Transitaba en su vehículo por la carretera a Tlacote, acompañado de su hijo de 15 años.

Un retén policiaco ubicado sobre esta vialidad, antes de llegar a Agrogen, le dio la instrucción de que se parara para una «revisión por parte de la Procuraduría, los operativos que estaban haciendo… Había patrullas con insignias de la PGJ, de Guardia Municipal de Querétaro, y otras de Corregidora», explicó el civil.

“Me pidieron que abriera la parte trasera de mi camioneta. La abrí y comenzaron a revisar. Estaba con uno de los agentes cuando llega otro con un cuchillo de mi propiedad en su mano. Ese oficial me dijo que eso era un delito, yo respondí que no, que me dijera en qué artículo se tipificaba».

Fue en ese momento cuando los agentes le ofrecieron que pagara la cantidad de tres mil pesos a cambio de no ponerlo a disposición del MP.

«¿Sabes qué? No voy a discutir contigo. Te la voy a poner muy fácil: son tres mil pesos o te pongo a disposición del Ministerio Público», fue la respuesta que le dio uno de los oficiales.

«Ese cuchillo no lo utilizo con fines de lesionar a nadie yo tengo la afición de ser campista y de hacer paseos por el campo y esa es la utilidad que yo le doy, se reduce meramente a una herramienta para esa actividad… Sé perfectamente que traer un cuchillo no es delito «, expresó cuando fue informado que iba a ser procesado por traer un arma blanca.

Tras no aceptar el trato, José Salvador y su hijo fueron escoltados a la agencia número 12A en Satélite por nueve agentes repartidos en tres patrullas diferentes.

“Manejé mi vehículo y otros iban en uno de la PGJ delante de mí y atrás venían dos patrullas más, una de la Guardia Municipal de Querétaro y otra de Corregidora», describió.

«Mi hijo estaba sumamente espantado por la situación. No es algo que se lleve de manera cotidiana, eso de que nos rodearon policías armados cuando el comandante dio la instrucción de que nos íbamos. Aunque no hubo un contacto físico con los policías, sí fue un amedrentamiento que te ataca psicológica y  moralmente», comentó acerca de lo que sufrieron él y su hijo menor de edad.

Además, denunció que su hijo no fue resguardado de manera inmediata al llegar al MP, como debió de haber hecho la autoridad ministerial, sino hasta que el padre lo solicitó antes de ser trasladado a Servicios Periciales.

En esa instancia, manifestó el abogado de profesión, los mismos peritos quienes le tomaban sus datos se sorprendían al conocer el motivo por el cual estaba siguiendo ese proceso. Le expresaban que el acto era un atropello que debía denunciar, que normalmente no se lleva ante esa instancia gente con cuchillos.

Finalmente, terminó por pagar tres mil pesos, los mismos que el señor Silva Reséndiz había negado desde el momento del retén de camino a su casa.

«Mi esposa compareció ante el MP y pagó la fianza para que me otorgaran la libertad administrativa por la cantidad de tres mil pesos. Otro hecho que me resulta también agravante porque es violatorio también de mis derechos», advirtió.

El Ministerio Público no ha aclarado el motivo de la detención

La detención duró de las 7:40 p.m. aproximadamente, cuando se enfrentaron al Operativo Interinstitucional, hasta las 3:30 a.m. del miércoles 24, hora que se pagó la fianza para que Salvador Silva fuera puesto en libertad.

A la fecha, el Ministerio Público no ha aclarado la formalidad por la cual se le detuvo a José Salvador Silva Reséndiz y por la que tuvo que pagar una fianza. «Espero entre hoy y el lunes comparecer ante la agencia del MP para personarme en esa averiguación y saber exactamente de qué se me acusa y en qué sentido para poder ejercer la adecuada defensa», evidenció.

Mientras tanto, el jueves 25 fue presentada la queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) alrededor de las cinco de la tarde para el trámite correspondiente.

Silva Reséndiz afirmó que también denunciará los hechos ante el Ministerio Público a pesar del temor que tiene de que no le den seguimiento adecuado al caso, aunque él considera que la conducta del agente que le pidió el dinero sí puede ser tipificable como delito. «En pocas palabras eso es corrupción y hay que denunciarlo», puntualizó.

«Algo que sí quiero mencionar es que cuando fuimos detenidos por el retén, al otro lado de la carretera estaban dos personas en un Tsuru blanco y también les estaban haciendo una revisión. Nos dimos cuenta que a uno de ellos le quitaron una navaja y les tiraban la cerveza que los jóvenes llevaban.

“Sin embargo, cuando fuimos al MP a ellos no los vi, quiero suponer que, o cambió el criterio, o estas personas accedieron a darles algún tipo de mordida», denunció el agraviado.

«En mi quehacer diario como litigante a muchos de mis clientes que me sugieren ofrecer dinero a las autoridades, siempre les he dicho que Querétaro es una entidad donde la corrupción no es bien aceptada porque yo tengo el concepto de que los jueces son personas altamente capacitadas.

“Nunca me había tocado una situación con la policía. Pero a raíz de esto, esta imagen que yo tenía de las instituciones se viene derrumbando, no generalizando a todos los elementos pero ya se ha convertido en un parteaguas para mi criterio», añadió.

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