La catedral, problema de siglos para la Diócesis de Querétaro
Santiago Apóstol, San Francisco, la Congregación, San Antonio y San Felipe Neri han sido los templos que fungieron como catedral en distintos tiempos
El tener una catedral siempre ha sido un problema para la Diócesis de Querétaro, pues desde hace 156 años han tenido que utilizar cinco diferentes templos como sede del obispado.
El 26 de enero de 1863 fue creada la Diócesis de Querétaro a través de la bula papal ‘Deo Óptimo Máximo’ del papa Pío IX. No obstante, hasta un año más tarde se tomó como primera catedral a la parroquia de Santiago Apóstol: el 7 de febrero de 1864; aunque duraría poco.
Dicha iglesia fue el templo recibió al primer obispo de Querétaro, Bernardo Garate y López de Arizmendi. Hasta entonces, el territorio queretano había sido sufragáneo de la Arquidiócesis de la Ciudad de México y la Diócesis de Michoacán (hoy Diócesis de Morelia).
Después de la parroquia de Santiago, el templo de San Francisco se convirtió en la sede de la Diócesis desde julio de 1865. Las razones del cambio fueron la posición topográfica y los estrechos límites de la parroquia de Santiago. El traslado fue formalizado por el Papa Pío IX en agosto de 1869. Ya entrado el siglo XX, los padres franciscanos solicitaron la devolución del inmueble de la parroquia de Santiago, y en 1910 se resolvió que no había inconveniente por parte del Estado.
Primer intento y La Congregación
Ese mismo año, en 1910, el obispo Manuel Rivera adquirió un terreno en donde actualmente se encuentra el jardín Guerrero, que destinó para edificar ahí una catedral definitiva. En 1911 se formó una junta y un concurso nacional para elegir un proyecto para la catedral, el cual ganó el ingeniero Manuel Velasco.
Se fijó un presupuesto de un millón y medio para la construcción y en mayo de 1912 se colocó la primera piedra. Sin embargo, durante el inicio de las labores de excavación para los cimientos, se encontró un cuerpo de agua a 10 metros de profundidad, por lo que se detuvo la obra.
A pesar de lo anterior, en enero de 1911 la Diócesis pasó al templo de La Congregación. Durante la Revolución mexicana, en 1914 y 1915, el templo fue saqueado por los constitucionalistas y convertido en almacén de maíz, arroz y azúcar; también se utilizó como salón de baile y fue destruido parte del archivo y la biblioteca. En mayo de 1915 fue reabierto el templo y fungió como catedral hasta agosto de 1920.
San Felipe Neri y San Antonio
Cuando la orden oratoria filipense abandonó el templo de San Felipe Neri, la Diócesis aprovechó para pedir al Vaticano la donación del reciento para la catedral y el seminario, lo cual fue autorizado en 1921. El templo fue declarado catedral por el Papa Benedicto XV en el mismo año y consagrado en 1931. No obstante, debido a remodelaciones del templo de San Felipe Neri, el templo de San Antonio fungió como catedral provisional, una vez en 1931 y otra entre 1932 y 1935.
En la segunda ocasión, el gobernador Saturnino Osornio ordenó la clausura de la catedral, por lo que un grupo de pistoleros invadió el templo de San Antonio para expulsar a todos los elementos y que el edificio quedara en poder de la federación. Desde 1935, el templo de San Felipe Neri se mantiene como catedral.