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Madres buscadoras: Desprotegidas y perseguidas por el Estado

Además del dolor por la pérdida, las historias de las madres buscadoras en México se caracterizan por la falta de protección del Estado e incluso la criminalización de las víctimas. Así se desprende de los testimonios revelados en el conversatorio Hasta encontrarte, realizado en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPS) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).

Las cuatro mujeres que compartieron sus experiencias de búsqueda fueron: Josefina Flores Paclán, en busca de su hijo Jaime Moreno Flores, desaparecido desde 2016. Si bien se detuvo a una persona, esta fue liberada un año después.

Rindió testimonio también María Guadalupe Arias Olvera, quien busca a su hijo Francisco Javier Mendieta Arias desde 2012 y no ha obtenido ninguna respuesta ni avance en el caso hasta el momento. María Teresa Sánchez Jiménez buscó y encontró a tres familiares, mientras que Mercedes Lourdes González González busca a su esposo Gabriel Morales Aguilar, desaparecido desde 2019.

Mercedes González expuso que el Estado no ha realizado ningún esfuerzo en los procesos de búsqueda, y son las mujeres y los colectivos quienes están llevando a cabo estas tareas. Según sus palabras:

«La autoridad me dijo: ‘Si es un borracho, búscalo con los borrachos; si es un drogadicto, búscalo con los drogadictos. Pero tu esposo no es ninguna de esas cosas, entonces, ¿dónde lo buscamos?’. Esta pregunta me molestó porque si supiera dónde buscarlo, ya lo habría hecho”.

Todas coincidieron en que después de vivir la desaparición de un familiar, se vuelven vulnerables y viven con el constante temor de que alguien más sea llevado. Teresa Sánchez enfatizó:

«Aunque nos vean de pie, caminando o riendo, el dolor nunca desaparece. Aunque ellos hayan regresado y ahora sé dónde están, la tristeza siempre permanece».

Entre los riesgos que han enfrentado, destacaron los obstáculos en los trámites con las autoridades, desde la falta de entrega de las carpetas de investigación hasta la ausencia de esfuerzos de búsqueda. Sánchez Jiménez, quien encontró a tres familiares en Veracruz, puntualizó:

«Me entregaron solo la cabeza de mi ser querido, pero falta el resto del cuerpo. Dicen que no pueden entregárnoslo hasta que se completen todos los restos, no solo de ellos sino de los más de 300 cuerpos sepultados en esa fosa clandestina. Hasta ahora, solo se ha entregado menos del 2 por ciento».

Además, existe el riesgo de la fragmentación familiar, ya que algunos de sus hijos han abandonado la búsqueda y otros familiares se han distanciado para no correr riesgos. Mercedes explicó:

«Para ellos, solo cambia el nombre o el desaparecido, pero la situación es la misma. No hay respuesta a nivel local ni federal. Chocamos contra un muro. Con la familia es como si no existiéramos. No quieren saber del problema».

«Todavía los buscamos porque los amamos. Por mi madre, que tiene 95 años, y mi padre, que también tenía 95 años cuando falleció el año pasado, esperando que su hijo regresara. Sí, han regresado, pero no de la forma que ellos deseaban».

concluyó Teresa Sánchez

Apoyo psicológico limitado

La organización Desaparecidos Justicia no ofrece atención psicológica, pero puede canalizar a las víctimas con especialistas de la UAQ o con profesionales sociales sin ningún costo.

El vocero de la organización enfatizó que no cuentan con el respaldo del gobierno ni de las instituciones que deberían brindar este servicio a las víctimas. Además, mencionó casos de falta de ética y violaciones a la privacidad por parte de psicólogos del sector público:

«La Fiscalía te asigna un asesor, pero su carga de trabajo es muy pesada. Las citas son muy distantes, y tuvimos una mala experiencia en la que lo que la madre contaba en la sesión ya era conocido por la Fiscalía. Por lo tanto, hemos tenido una mala experiencia con los psicólogos de las autoridades».

El riesgo de las brigadas

Desaparecidos Justicia no se enfoca en realizar brigadas de búsqueda, ya que consideran que es responsabilidad del Estado. Sin embargo, algunas familias llevan a cabo estas acciones. El vocero de Desaparecidos Justicia destacó que es muy arriesgado y no corresponde a las familias asumir esta responsabilidad, sino que -6desaparecidas. Según informó, tiene conocimiento de 12 madres privadas de la libertad por buscar a sus hijos en el país, además de las amenazas debido a la falta de estrategias para proteger a las madres y a las familias de las personas desaparecidas.

Según las fichas de búsqueda de la Fiscalía General del Estado, las personas desaparecidas son en su mayoría hombres mayores. Según la revisión realizada el 17 de mayo, este grupo representa el 72,5% de los casos, con 222 fichas. Le siguen las mujeres mayores de edad, con 44 casos, y luego los varones menores de edad y las mujeres menores, con 24 y 16 casos respectivamente.

Dafne Azuby Arreola Santana

Estudiante de la Licenciatura en Comunicación y Periodismo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Querétaro. Parte del equipo de Verificado Tribuna durante las elecciones 2021 y reportera de Tribuna Diario desde agosto de 2021.

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