Prensa, denostada en mitin de AMLO
Andrés Manuel López Obrador llegó tarde a su cita con Querétaro. Por la entrada principal al estadio de beisbol se pudo vislumbrar no el clásico Jetta, sino una camioneta negra último modelo de la cual descendía el capitán del nuevo gobierno, ese hombre con más ponches a la mafia del poder.
Apenas descendió de su vehículo —y como si se tratase del beisbolista Fernando Valenzuela en alguna avenida de Los Ángeles—, el presidente fue asediado por integrantes de su querida prensa ‘fifí’, que con letales micrófonos, grabadoras y cámaras lo rodearon para ofenderlo con cuestionamientos a su gobierno y la renuncia de su secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
El ‘chacaleo’ transcurría con normalidad, hasta que gente amontonada en las vallas metálicas comenzaron a ofender a los trabajadores de los medios con gritos como «prensa fifí», «prensa vendida» o «déjenlo pasar, vayan a la mañanera», e incomodaron a más de uno de los reporteros que trataban de no caer en provocaciones y realizaban su labor.
El presidente los atendió con calma, situación que causaba cada vez más enojo entre los asistentes que exigían ver, aunque fuera por un segundo, a su presidente.
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