Querétaro: 30 años de Sociología
Por: Eduardo Martínez Pérez
Cerca de sesenta personas se aprietan para tomar una clase en un aula de la Facultad de Derecho. No todos son jóvenes. La mitad pasa de los cuarenta años y, entre los otros, muchos son jóvenes que ya han probado suerte en otras licenciaturas.
Los que están recién salidos de la prepa son los menos. En muchos de ellos hay incertidumbre. No saben cuál es el futuro de la licenciatura que están estudiando. Ignoran que, dentro de treinta años, esa licenciatura habrá dado origen a una facultad, cinco licenciaturas, tres especialidades y dos programas de maestría.
Ignoran, además, que en unos años habrá movilidad académica y se ofrecerán unidades de aprendizaje sobre género, violencia y problemáticas de América latina. De momento sólo se disponen a estudiar algunas teorías. Repasan nombres: Weber, Durkheim, Marx.
Se preguntan cómo aplicarán esas teorías a la realidad de una ciudad que crece a un ritmo vertiginoso y ve nacer nuevas colonias como el Tintero y Lomas de Casablanca. Una ciudad que —ellos no lo saben todavía— pronto recibirá una oleada masiva de habitantes como consecuencia del terremoto que está por asolar a la Ciudad de México; una ciudad con problemas cada vez más agudos.
Esos jóvenes, los que ahora repasan a Weber, Durkheim y Marx en una clase de sesenta personas, son la primera generación de la Licenciatura en Sociología. Estamos en agosto de 1984.
{loadposition FBComm}