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Los “exabruptos” panistas a lo largo de la historia

Por: Juan Rojas

Cuando el dramaturgo español, Jacinto Benavente, escribió que la única revolución posible era poner luz en las cabezas y calor en los corazones, no contaba con la legión de exabruptos panistas que yacerían en el sistema político mexicano.

El partido fundado por Manuel Gómez Morin, en franca oposición al cardenismo, se jacta de predicar una democracia cristiana basada en el humanismo y los valores familiares; sin embargo, sus acciones en la historia política nacional ejemplifican lo contrario: la fiesta de la bancada panista en Puerto Vallarta con bailarinas de un “table dance”, las palabras de Torreblanca sobre los “perredistas prietos”, los neonazis jaliscienses, Calderón y su violento sexenio, etc. Y Querétaro, que durante años ha sido un bastión panista, no se encuentra ajeno a los exabruptos del partido.

A principios de los setenta, el entonces presidente de México, Luis Echeverría Álvarez, visitó Chile con su clara, aunque poco predicada, admiración por el socialismo de Allende. Durante el vuelo, explica José Agustín en la Tragicomedia Mexicana II, se destaparon caras botellas de coñac y se gastó en lujosos restaurantes sin algún criterio de austeridad.

Para el 2001, el gobernador del estado, Ignacio Loyola Vera, emuló aquella puesta de nepotismo solo para confirmar la escasa animadversión ideológica entre PRI y PAN. Según el alcalde de Corregidora de ese entonces, David López Corro, Loyola acudió a lo que en el país andino se conoce como “café con piernas”, o sea, un restaurante en el que las mujeres atienden en topless. Al cuestionar al gobernador sobre dichas declaraciones y sobre si visitar sitios así era inapropiado, el panista sentenció: “malo hubiera sido visitar un lugar de puñales”.

En la lista de exabruptos panistas aparece el que fuera subsecretario de gobierno en el periodo de Francisco Garrido Patrón, Jesús Carlos Hernández, quien dijo que él no robaba porque “Dios y la virgen María” lo “vigilaban”.

De igual manera, en 2007, el entonces diputado local Fernando Urbiola Ledesma, comparó a los homosexuales con mascotas al señalar que si una pareja homosexual podía reclamar el título de familia, entonces alguien con mascotas también podría reclamarlo sin ningún problema.

Más recientemente, el diputado local, José González Ruiz, llamó “desviados” a las personas homosexuales y María del Carmen Zúñiga, quien fue alcaldesa interina en 2012, remató al decir que “los conflictos sociales se dan por ir contra la naturaleza familiar”.

Sin embargo, los exabruptos de Zuñiga no terminaron ahí. El pasado ocho de octubre, la ahora diputada local expresó que la alerta de género ante los feminicidios era innecesaria y además, dijo que si las mujeres no querían ser violentadas lo que tenían que hacer era “darse a respetar”.

Ni las filigranas de Ronaldinho lograron evadir los arranques del PAN: Carlos Manuel Treviño Núñez, exsecretario de Desarrollo Social del municipio, calificó al brasileño como “simio”, lo cual desató una serie de críticas en su contra dentro de redes sociales.

El austriaco Alfred Adler, dice que una de las características del neurótico es que posee una inferioridad orgánica, como se ve amenazado por esta inferioridad, lo compensa psíquicamente y de ahí viene el complejo de superioridad, aunque quizá, como dice Joaquín Sabina, sólo se traten de exabruptos “en la punta de la polla”.

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