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Necesario que gobiernos impulsen “convivencia pacífica” entre habitantes, exhorta especialista

“Una de las tareas de las instituciones es cuidar que haya un equilibro entre habitantes viejos y nuevos en las ciudades”, consideró Ángela Giglia Ciotta

Por: Isamar Cabrera Ríos

Ángela Giglia Ciotta, Doctora en Antropología por la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales en París y especialista en cultura urbana, manifestó que para consolidar la habitabilidad de las ciudades, el gobierno necesita “procurar que exista esa convivencia pacífica entre actores que tienen intereses diferentes”, y que en este esfuerzo “no deben quitar el dedo del renglón”.

Entrevistada al término de su participación en el seminario “Habitar la ciudad”, impulsado por la Licenciatura en Estudios Socioterritoriales, Giglia Ciotta se pronunció a favor de respetar la heterogeneidad que se observa en las ciudades, entre los “nuevos” y los “viejos” habitantes.

“Creo que una tarea de las instituciones es cuidar que haya un equilibrio entre habitantes viejos y habitantes nuevos para mantener un rasgo muy importante de la ciudad, que es su heterogeneidad, como lo decíamos en el seminario.

“Si hay algo que hace a la ciudad es la posibilidad de encuentro entre personas distintas (…) salir de la casa y meterse al espacio público es esa gran oportunidad de encontrar a personas diferentes. En este caso los viejos y los nuevos habitantes son bastante diferentes los unos de los otros.

“Lo importante es tratar de encontrar un equilibro entre esos componentes heterogéneos”, enfatizó la autora de la conferencia “Vivir en el centro. Prácticas sociales y conflictos de proximidad”, que se presentó el viernes 18 de octubre.

Ángela Giglia señaló que habitar el espacio de una ciudad concierne sus propias reglas de convivencia y establecer un pacto social vigente.

“Para prevenir la violencia es necesario garantizar el respeto de la ley y, al mismo tiempo, en lo que se refiere a los habitantes propiciar que haya una convivencia armónica entre los nuevos y viejos habitantes”, resaltó.

La especialista también se refirió al fenómeno de la autosegregación que se está observando en varias ciudades, en el cual las personas con poder adquisitivo buscan evitar “una serie de peligros”.

“El problema es que en la ciudad juegan e intervienen actores sociales con poderes distintos para modificar el espacio. Hay algunos actores que no tienen recursos y padecen del espacio, malas condiciones de habitabilidad del espacio. Muchos de ellos logran gracias a su dinero, vivir en condiciones casi óptimas.

“Una parte de esos actores optan por autosegregarse, por generar espacios residenciales cerrados, vigilados, a través de los cuales evitan una serie de peligros y de complicaciones que tendrían al vivir o tener un mayor contacto con el espacio público, con los distintos actores que intervienen en él.

“Son procesos que se están dando en muchas ciudades, no solamente en Querétaro, son síntomas de que es cada vez más difícil organizar la vida en común en la ciudad de estos distintos actores, procurar que exista esa convivencia pacífica entre actores que tienen intereses diferentes, pero creo que es una tarea que no se puede abandonar, y las instituciones públicas y locales deberían no quitar el dedo del renglón (…) mediante procesos de participación social, certidumbre en cuanto al respeto de los reglamentos y leyes”, explicó.

Además, Giglia Ciotta consideró que el desorden es necesario para llegar al equilibrio. En Las reglas del desorden se encuentran tres ideas rectoras que siguen vigentes en las calles de México: La primera señala la convicción de que “es casi imposible pensar en la metrópoli sin partir de los espacios públicos”.

La segunda sostiene que tras el aparente desorden, existe una serie de reglas o lógicas sociales que norman la relación entre las personas y el territorio, y que organizan los comportamientos de los individuos en el espacio urbano.

La tercera plantea que estas reglas que norman el uso y apropiación del espacio metropolitano, varían de acuerdo con el tipo de espacio urbano habitable.

“La inversión trae consigo más violencia cuando se crea desigualdad en los espacios, esto cuando se excluye a la población”, señaló Ángela Giglia.

“Habitar la ciudad”, seminario en homenaje al académico Emilio Duhau López

El evento “Habitar la ciudad” tuvo lugar en el Auditorio de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales como parte del Seminario Permanente de Estudios Socioterritoriales (SPEST). Se hizo en homenaje a Emilio Duhau López, quien fuera profesor titular «C» del Departamento de Sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Unidad Azcapotzalco.

La  coordinación del evento estuvo a cargo de Carmen Imelda González Gómez, coordinadora de la Licenciatura en Estudios Socioterritoriales, y Daniel Hiernaux, quienes puntualizaron que el seminario es dirigido a toda la comunidad universitaria con el objetivo de consolidar y actualizar la Licenciatura, que desde su inicio -en  2011- ha ido en crecimiento y actualmente cuenta con 50 alumnos.

Como parte del evento organizado por el SPEST, Ángela Giglia Ciotta expuso “Vivir en el centro. Prácticas sociales y conflictos de proximidad”, espacio en el que abarcaron temas como: Habitar; Transformar un “no lugar” en un lugar; Habitar de la ciudad de México descubriendo la Alameda Central renovada; y Habitar el espacio sin residir en él”.

Por su parte René Coulumb Bosc presentó “Habitar la centralidad: elementos para un debate”.

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