Corrupción electoral
Por Sergio Centeno García
Después del pasado proceso electoral ha quedado muy claro que los grupos de poder político y económico en México, jamás van a ceder la Presidencia de la República a alguien que no sea cómplice o miembro de su misma pandilla.
Todo parece indicar que a diferencia de hace seis años, cuando mediante el fraude se impuso al inepto Felipe Calderón como ocupante de Los Pinos, hoy la brecha de votos entre el candidato del poder y el candidato del pueblo, es mucho más amplia. Y los propagandistas del régimen, los matraqueros de los medios electrónicos, pregonan a los cuatro vientos que ya todo está consumado y que ya hay un Presidente electo. Sin embargo, para quienes pensamos diferente eso no es lo importante, porque lo que está en discusión es: ¿cómo lograron los poderosos conseguir tantos votos? ¿Fue sólo a través de su propuesta y de su gran trabajo en campaña o por el liderazgo irrefutable de su abanderado? La gran mayoría de los mexicanos sabemos que esto último no es así, que hay demasiadas cosas turbias detrás de todo este proceso electoral.
Hay en nuestro país una especie de cultura del silencio cómplice, de la simulación y la hipocresía social que mucho nos ha hecho daño y lo seguiremos padeciendo hasta que las masas se ilustren y se conviertan en masas informadas y educadas. Es decir, una gran mayoría de los mexicanos acepta que Peña Nieto y el PRI ganaron con trampas y corrompiendo conciencias, y sin embargo, no se expresan, o incluso, hasta condenan a quienes se atreven a denunciar la corrupción que hubo antes y durante el proceso electoral.
Se dice que la campaña de Peña Nieto ha sido financiada con recursos de procedencia ilícita, con recursos obtenidos del lavado de dinero, pero… ¿de verdad alguien duda esto?; se dice que los priistas rebasaron con mucho los topes de campaña, porque gastaron cientos de millones de pesos en propaganda, despensas y muchas cosas más para regalar y hacer proselitismo, y… ¿alguien lo duda?; se dice que todos los gobernadores priistas echaron mano del presupuesto de su estado para reunir millonadas para fortalecer la campaña de Peña Nieto, y que con ese dinero y otros de dudosa procedencia se hizo una compra masiva de votos para favorecer al candidato del PRI, y yo me pregunto: ¿alguien duda que eso haya ocurrido así?, se dice también que se utilizaron las encuestas como spots de campaña para beneficiar a Peña Nieto y para hacerle creer a la gente común que la elección ya estaba decidida a favor del priista, y otra vez me pregunto: ¿alguien duda que eso haya sido de esa manera? ¡Por supuesto que no! ¡NADIE LO DUDA! Todo mundo sabemos que de las cosas que se ha acusado al PRI, a Televisa y a toda la mafia, la gran mayoría son ciertas. El problema es… que se tienen que presentar las acusaciones y las pruebas ante ciertos jueces o “magistrados” y ahí, ellos van a decir que no es verdad, que todo está bien, que ha sido una elección ejemplar, limpia, histórica y más.
Que la mayoría de los funcionarios del IFE son corruptos y están totalmente del lado de los grupos de poder (PRI y PAN), después de que los mismos consejeros están defendiendo al PRI, a Televisa y a las encuestadoras utilizadas para hacer propaganda a favor de Peña Nieto. Que el TEPJF está lleno de magistrados corruptos que simplemente aunque haya habido una gran cantidad de irregularidades le darán el triunfo a Peña Nieto, ¿alguien lo duda? Opino que nadie o muy pocos.
La pregunta es: ¿qué estamos haciendo para denunciar la farsa y la mentira? Por eso, mi admiración y mis respeto a los jóvenes del #YoSoy132, a los educados, a los indignados, a AMLO y muchos más que se mantienen en pie de lucha. Sólo ellos son los imprescindibles de Bertold Brecht. Pienso.
Comentarios: sergiocenteno05@live.com
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