Aniversario de la Constitución: Un ritual sobre el que no pasa el tiempo

Democracia amenazada por desigualdades
La ceremonia de 1989 fue la primera de Carlos Salinas de Gortari como presidente de la República, cargo en el cual tenía poco más de dos meses. El priista habló de amenazas para la democracia, pero no por el sistema electoral, el cual fue puesto en duda un año antes en las elecciones que le dieron el triunfo, esas en que se “cayó el sistema”.
Salinas de Gortari habló de la “creciente desigualdad social, los contrastes en las condiciones de las vidas de los mexicanos y la dimensión de bienestar en la mayoría de la población, [todos] representan la principal amenaza para el desarrollo de la democracia”.
Otro evento al que acudió el presidente fue la inauguración del parque “Los Alcanfores”, en cuyo acondicionamiento se habían invertido “alrededor de 2 mil 500 millones de pesos”, claro, la cifra incluyó los tres ceros previos a la devaluación.
Fue la dignificación de un sitio que solía ser catalogado como “basurero contaminante” y plagado de “incertidumbre y temor”, en palabras del discurso de Edmundo González, sociólogo que inició la cruzada para dignificar el parque. Se procuró el “rescate del bosque para convertirlo en sitial de cultura para el pueblo y espíritu”, advertían medios locales.
Las piedras contra el gabinete
Aunque la ceremonia de 1998 había transcurrido conforme al protocolo, el evento terminó por ser noticia gracias al apedreo del camión donde viajaba el gabinete del presidente Ernesto Zedillo. La agresión ocurrió en el inicio de gobierno de Ignacio Loyola Vera, primer mandatario emanado del Partido Acción Nacional (PAN).
Las pedradas fueron atribuidas a líderes sociales, quienes fueron perseguidos y encarcelados por la administración estatal. Uno de los imputados, Sergio Jerónimo Sánchez Sáenz, refirió años después que todo se trató de un montaje para desarmar a los movimientos sociales.